lunes, 23 de enero de 2012

Capítulo 7. Lo siento pero tengo que decirte que te quiero.


       Era increíble. No sabía que decir, por lo que me limité a responder:
-          Dime.-Mi corazón latía a mil por hora, en segundos, todo lo que llevaba esperando desde los once años, aquellos sentimientos, se derrumbarían, o se harían mas fuertes.
-          Pues mira, Helena. Que me gustas, y que siempre me has gustado. Pero, que esto es cosa de dos, y, me gustaría saber que opinas.
-          Puu...Pues Pablo…- Pero antes de acabar la frase, me corto.-
-          Oye Helena… que no digas nada.
Era como un sueño, de repente, empecé a ver los ojos verdes de Pablo, acercándose a mí. Su cara, su pelo castaño, su rostro, cada vez mas cerca. No pude decir nada, ya que sus labios a penas tocaban los mios, e impulsada por mis deseos, aunque no era, lo que le agradaba a mi “yo” inteligente, le imité. Nos besamos. O mejor dicho, me besó, y yo le continué. Sabía que no debía hacerlo ya que era un putón, que se liaba con todas, las que encontraba, pero, ya, era demasiado tarde para parar. Fue mágico. No podía parar. Estaba enamorada de él.
Al momento, se oyó la puerta de la entrada principal. Repentinamente, dejamos de besarnos. ¿Quién sería?¿Nos habrían visto?  Teníamos el corazón en un puño. Al segundo, pudímos aspirar tranquilos. Eran los de primero, que salían al recreo. Como por acto involuntario, ví a Pablo con carmín en los labios. No pude evitar reirme.
-          ¿Qué pasa? ¿No estoy guapo? Ah, ya sé… Será que no me queda bien este color…-Dijo. Se había dado cuenta de que me reía.
-          Que tonto. Anda trae.- Cogí mi dedo pulgar, y se lo pasé por la boca. Buf. Era inevitable mirarle, y no sonreir.- Si te sirve de consuelo, a mí me parece que te queda bien, pega con tus ojos.
-          Y si te sirve a ti, cada día eres mas guapa.-Me miró,  y me dio un beso corto, pausado, que a pesar de ello, no podía transmitir más.
-          Pablo… ¿Por qué lo haces?- Dije. Estaba nerviosa. Demasiado.
-          Porque quiero demostrar mi amor hacia ti- Respodió. Seguro de sí mismo.
-          Y lo demuestras hoy…- Sentí que lo había dicho en plan borde, pero me salió solo. Lo intenté arreglar lo mejor que pude- Es decir...- Me cortó.
-          Hoy. Es el día perfecto. Esperaba este día desde hace años-No me lo creí del todo- Y ahora. Que estas junto a mí, te puedo decir, ¿Helena López, quieres salir conmigo?
Sabía la respuesta. La tenía clara. Y había mirado en mis dos “yo” interiores. Asi que me animé y le respondí: 

1 comentario:

  1. Hola! :) Me gusta mucho la historia, está muy bien!
    Te sigo! ^^ Me sigues??
    Besos!<3
    PD: Estoy deseando continuar leyendo^^

    ResponderEliminar